Como cada año desde hace ya 4, se acercaba la fecha del aniversario de la CAR y era menester el asistir a este evento, que dicho sea de paso fue todo un éxito, la verdad es que me abrió el panorama acerca de los cíclidos africanos riofílicos.
El viaje comenzó a las 9:00 pm aunque estaba programado para las 5:00 pm… debido a algunos contratiempos no pudimos salir antes, sin embargo no estuvo del todo mal ya que esto me dio la oportunidad de arreglar bien las cosas sin apresurarme y además pudimos salir de la ciudad con menos tráfico del que esperábamos.
Una vez en el camino y conociendo la carretera nos detuvimos hasta llegar a San Luis Potosí, ahí llegamos para descansar y cargar combustible, después de 2 horas y media de un sueño reparador nos volvimos a poner en marcha tomando la ruta hacia Matehuala.
Llegamos a Monterrey a las 9:00 am y nos dirigimos directamente a la casa de los peces de Marco Arroyo, ahí pudimos ayudarlo a “colectar” los peces para la subasta del evento, digo colectar porque de verdad es toda una aventura llegar a esa casa y tratar de sacar algún pez. 
Finalmente nos hospedamos en el hotel sede del evento, una vez iniciado todo estuvo perfecto, hicimos transmisión simultanea del evento en vivo, desafortunadamente no mucha gente lo disfrutó por este medio. Todo estuvo de lujo: Las conferencias, la comida, la subasta, las rifas, el ambiente… es una experiencia que si no la vives en persona no te puedes dar una verdadera idea de como es, les recomiendo que no se pierdan la próxima, sólo me gustaría agregar que Omar se sacó en la rifa una pecera nueva de 180 lts. que si no hubiéramos ido en camioneta nomas no hubiéramos podido llevarla con nosotros.
Al día siguiente en la mañana nos dispusimos a salir rumbo a Cuatro Ciénegas mientras que la mayoría de los asistentes a la conferencia que venían de otras ciudades (Juan Miguel Artigas y los conferencistas incluidos) se fueron a un lugar cercano en busca de fotografiar al conocido cíclido Texano.
Después de un camino de 3 hrs., un percance con unos agentes de tránsito en Ciudad Frontera y de la comida estábamos arribando al Río Mezquites alrededor de las 5:00 pm, rápidamente nos dispusimos a aprovechar lo poco de luz de día que nos quedaba y fue así que nos lanzamos al río en busca de fotografiar nuevamente (en mi caso) al Herichthys minchleyi, lepomis megalotis y demás habitantes de este mágico lugar.
Después de tomar las fotos tanto fuera como dentro del río, nos dirigimos al pueblo de Cuatro Ciénegas, lugar muy acogedor en donde encontramos un bonito hotel de lo mas pintoresco y de precio módico, ahí descansamos de las anteriores jornadas para temprano alistarnos y salir rumbo a la ciudad de México.
Antes de salir decidimos pasar por la Poza Azul, un lugar espectacular, que es de donde mana el agua que alimenta al “Mojarral” y al mismo Río Mezquites.
Este es un lugar increíble por su belleza, afortunadamente logramos hacer algunas tomas subacuáticas, lo que nos dio una perspectiva totalmente diferente, este lugar es impresionante y se puede dar un vistazo a un hábitat que ha permanecido intacto desde que se formó, lo cual me parece muy acertado. El agua es de una claridad pasmosa, mucho mayor que en el río, y pudimos comprobar que el nombre de Poza Azul está muy bien elegido. Aquí la incidencia de peces no es mucha, debido al poco espacio sin embargo tuve la oportunidad de encontrarme con un ejemplar amarillo del Herichthys minckleyi, lo que hacía un hermoso contraste con el azul del lugar.
Aquí vemos una hermosa flor subacuática, algunos otros peces y el espectacular azul del agua.
Finalmente cansados pero muy contentos emprendimos el regreso…
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